VENEZUELA DEBERA EQUILIBRAR LA BALANZA CON BRASIL

Venezuela deberá equilibrar balanza con Brasil ante el Mercosur 07:02 a.m. | Fabiana Culshaw.- De todos los países del Mercosur con el que Venezuela tiene una relación comercial más intensa es con Brasil, por lejos. Esto se debe a que la potencia sureña destaca por su peso geopolítico y porque ha ido diversificando su producción, sobre todo la de alimentos, lo que le viene "como anillo al dedo" a Venezuela. El intercambio comercial entre Venezuela y Brasil se cuatriplicó en la última década, pero la balanza se mantiene totalmente a favor del vecino Brasil, lo que es difícil de revertir. De cara al Mercosur, ese desequilibrio podría representar un handicap para Venezuela, dado que el funcionamiento del bloque será más equilibrado y eficiente cuando así lo sean las relaciones entre los países, o por lo menos, se tienda a ello. Favorable a Brasil Al cierre del 2011, las importaciones desde Brasil superaron los $4.551 millones y las exportaciones desde Venezuela hacia ese país apenas superaron los $1.260 millones, según datos de la Cámara de Comercio e Industria Venezolano-Brasilera (Cavenbra). En lo que va de este año 2012, se estima que se mantiene similar a 2011, es decir, no se ha logrado mejorar el equilibrio de la balanza comercial. Otro aspecto que caracteriza la relación comercial con Brasil es que ha ido cambiando el tipo de productos que se importan desde ese país. Obsérvese que actualmente los alimentos (como azúcar de caña, carnes deshuesadas de bovino y bovinos vivos, entre otros) lideran la lista de las importaciones desde Brasil, mientras que hace 10 años lo hacían los automóviles, los terminales de telefonía celular y las partes para tractores y otros vehículos. De Venezuela a Brasil se exporta petróleo y derivados, pero no mucho más, aunque el panorama podría cambiar: el Gobierno ha declarado en los últimos días que, ahora que Venezuela es miembro pleno del Mercosur, tendrá la oportunidad de desarrollar más su producción e industrias nacionales, con miras a la exportación. "Entramos en la era exportadora", dijo el presidente Hugo Chávez, en cadena nacional. Agregó que, por ejemplo, Brasil está importando urea y vidrio a gran escala y que Venezuela podría ser uno de sus principales proveedores en cuanto a esos productos. La oposición al Gobierno opina que la aspiración de potenciar la exportación está muy lejos de la realidad venezolana, la cual ha estado signada por leyes que perjudican al sector privado, lo que ha ocasionado una disminución significativa de la industria nacional. No obstante, la esperanza de que las políticas cambien ante la oportunidad del Mercosur parecen levantarse. "La balanza comercial entre los países debería ser lo más equilibrada posible. A la larga, no se favorece ninguna de las partes, si no existe equilibro. Recuerdo muy bien cuando, hace algunos años, el presidente Ignácio Lula Da Silva le preguntaba al presidente Hugo Chávez, "¿qué necesitan?", en un intento de que el intercambio fuera más balanceado", señaló Nelson Quijada, presidente de la Cámara de Comercio e Industria Venezolano-Brasilera (Cavenbra). A su juicio, se han hecho intentos por equilibrar las relaciones bilaterales, pero hasta ahora no han dado resultado. "Las relaciones con Brasil se han estrechado por afinidades del Gobierno venezolano con el de Brasil, tanto con Lula como con la presidenta Dilma Rousseff, especialmente cuando hubo fuertes problemas con Colombia, pero el tema de la balanza comercial siempre ha sido deficitaria para nosotros, últimamente aún más. No llegamos al 20% del total de la balanza y el 80% es de Brasil", agregó. Mecanismos de equilibrio Según Quijada, Venezuela no cuenta en este momento con mecanismos para cubrir ese desequilibrio a favor de Brasil, debido a su escasa producción nacional. Además, se corre el riesgo de que el desequilibrio se acentúe, considerando que recientemente el país vecino ha encontrado yacimientos petroleros, por lo que, a largo plazo, quizás no necesite tanto la importación del oro negro como ahora. "Incluso, existe la posibilidad de que, a futuro, Brasil se convierta en competidor de Venezuela en materia petrolera", advirtió Quijada. A su entender, el desbalance comercial podría comenzar a ser "compensado" con el mayor aprovechamiento de la tecnología brasilera por parte de Venezuela, a través de la cual podría desarrollar su industria nacional, en especial en materia agrícola. "Brasil cuenta con alta tecnología probada en el campo, que podría aprovecharse acá porque nuestras tierras son similares. La experiencia brasilera en investigación de cultivos, aplicada acá, nos ahorraría tiempo y representaría eficiencia en nuestra producción agrícola, a través de la cual se podría lograr mayor rendimiento de las cosechas y ampliación de cultivos. Con industrias venezolanas diversificadas, podríamos sí ir equilibrando las relaciones comerciales con los países del Mercosur", dijo el presidente de Cavenbra. Foco en el norte de Brasil Nelson Quijada considera que Venezuela debería enfocarse en exportar más al norte de Brasil, dado que es difícil alcanzar a San Pablo o Bello Horizonte, zonas que tienen gran flujo de importaciones, pero están distantes de este país, con lo que el costo del transporte de mercancías resulta demasiado alto. "La oportunidad inmediata de exportación venezolana está en el estado de Roraima y en Amazonas, fundamentalmente en su capital Manaus, que tiene un potencial enorme en su zona franca industrial y consume toneladas de aluminio, que, en mejores condiciones, podríamos proveer", comentó el ejecutivo. Empresas brasileras acá La meta no es solo que el Mercosur sirva de bisagra para el desarrollo del comercio intrazona y con otros bloques o países, sino que también se desarrollen proyectos empresariales conjuntos. Consultado sobre si la inseguridad jurídica de Venezuela "ahuyenta" a las empresas brasileras, Quijada opinó que "siempre las condiciones de los países y sus gobiernos son mejorables, pero la realidad es que muchas empresas brasileras están instaladas o hacen inversiones en Venezuela". Como ejemplo, destacó a la constructora Andrade Gutiérrez, Odebrecht y Camargo Correa, las cuales tienen contratos con el Gobierno venezolano y desarrollan, aun con contratiempos, las obras del Metro y del Puente sobre el Orinoco, entre otros proyectos. Lo cierto es que, según nuestro trabajo de investigación, son numerosos los acuerdos firmados entre el presidente Chávez y su homóloga Rousseff en los últimos años. Muchos avanzan a buen ritmo, algunos se han estancado en fases iniciales y en otros se desconoce su grado de avance. Es de esperar que el Mercosur sirva de plataforma para una "activación" favorable a ambos países y al resto de sus Estados miembros. De ser una "expresión de deseo", el bloque se enfrenta al reto de superarse para pasar al "logro regional" que buscan los gobiernos que lo integran. No será fácil.